Básicamente se denominan empresas “unicornio” aquellas que desarrollan software de redes sociales y servicios online y en diez años valen más que muchas compañías históricas. Lo que pareciera ser el relato de un mito -de ahí surge en parte su denominación- fue una realidad que pudieron mostrar las primeras empresas que en base la pura innovación y desarrollo tecnológico en muy poco tiempo llegaron a cotizar en un millón de millones de dólares.
La pregunta es ¿Cómo estas empresas logran alcanzar ese registro y que factores tienen en común para lograrlo? ¡Aquí parte de su explicación! Aunque no significa que sean las únicas condiciones para lograrlo:
- La edad promedio de los emprendedores que las fundaron es de 34 años.
- Surgieron en la era de las redes sociales, y supieron aprovechar su auge para consolidarse y crecer.
- Son B2C (Bussines to Consumer), es decir, desarrollan una estrategia comercial para llegar directamente al cliente o consumidor final.
y estos son algunos resultados quizás más visibles acerca de esta categoría de empresas:
- En promedio, en la década pasada nacieron cuatro empresas unicornio por año.
- Han generado aproximadamente 26 veces más el valor por cada dólar privado invertido.
- El 90 por ciento de las compañías tienen fundadores que ya se conocían antes, compañeros de estudios o de trabajo.
- Casi el 90% de compañías del Unicorn Club están ubicadas en Silicon Valley, San Francisco.
Con la juventud, internet y una estrategia comercial de vinculación directa con los consumos cotidianos de sus “clientes”, queda claro que la naturaleza vincular de comunicación virtual que define a esta era fue el marco perfecto para que los innovadores jóvenes aplicaran lucidez y creatividad para ver —y, en muchos casos, mejorar— una demanda que aparecía difuminada en los comienzos de la década.
Si pensamos que muchas de estas empresas se encargan de generar, sostener y continuar desarrollando las redes sociales que usamos todos los días para comunicarnos en cualquier ámbito y que otras se ocupan de brindarnos servicios de búsquedas, traslados o ubicación, se hace claro que la clave del éxito de estas startups estuvo en satisfacer y fomentar una demanda de mercado universal con Internet y la telefonía móvil inteligente como patas del andamio que sostiene su modelo de negocio.
En total existen nueve empresas valuadas en más de mil millones de dólares que se reparten entre cuatro países: México, Argentina, Brasil y Chile. La aplicación concreta a las necesidades diarias de los consumidores —comprar y vender o buscar un pasaje de avión barato— y, sobre todo, la practicidad de los servicios ofrecidos a punto tal de convertir una idea en una app sencilla para cualquier teléfono, parecen ser las claves de estos enormes emprendimientos a nivel continental.